“En EA hay quien no está de acuerdo con las normas de las que nos hemos dotado entre la afiliación, saboteando el rumbo marcado entre todas y todos, por vía mediática y judicial”
Durante este juicio se han vertido acusaciones falsas, infundadas y calumniosas sobre la dirección de Eusko Alkartasuna; acusaciones que buscaban desacreditar a la Ejecutiva Nacional, así como socavar el honor de sus miembros. Pero no lo han conseguido. En estas tres sesiones varios miembros de diferentes órganos de Eusko Alkartasuna han desmontado una a una las mentiras con las que Maiorga Ramirez, Iratxe López de Aberasturi, Mikel Goenaga e Miren Aranoa han intentado ganar fuera del partido las decisiones legítimamente adoptadas en el mismo.
Ante las acusaciones extendidas en los medios sobre una supuesta falsificación de estatutos, la dirección de Eusko Alkartasuna ha solicitado en sala la retirada de dichas acusaciones y una rectificación pública por haberse demostrado que eran totalmente falsas. “Los cuatro demandantes no han podido aportar ni una sola prueba de las graves acusaciones vertidas sobre esta dirección y la anterior ejecutiva”.
Esta ejecutiva, liderada por Eba Blanco, así como durante el mandato de Joseba Gezuraga y antes Pello Urizar, ha obrado siempre con los reglamentos en la mano y siguiendo las órdenes de su Asamblea Nacional – el máximo órgano de control entre Congresos-. Y cuando nuestra reglamentación no recoge específicamente un asunto a tratar, como en este caso la Ley de Protección de Datos (renovada después de nuestros estatutos), hemos acudido a la fuente directamente, para poder seguir dirigiendo con honestidad el partido.
En todo momento ha estado en manos de los demandantes la posibilidad de dar por concluida la vista, y sin embargo han preferido exponer a Eusko Alkartasuna y por ende a EH Bildu y EH Bai – inmersos en campañas electorales- a tener abierto un proceso en los tribunales ordinarios.
Hay quien no está de acuerdo con las normas de las que nos hemos dotado entre la afiliación, y lleva cuatro años intentando sabotear el rumbo que marcan los afiliados en cada asamblea y congreso, por vía mediática o judicial. Ahora será la justicia ordinaria quien dirima si la honestidad, la reglamentación interna y democracia de un partido político están por encima de los intereses personales de cuatro personas.
Desde Eusko Alkartasuna confiamos en que gane la primera opción, para poder seguir aportando políticamente a la sociedad vasca lo que se espera de nosotras; una apuesta responsable por la justicia social, la soberanía política, el respeto al medio ambiente, el equilibrio económico y una convivencia pacífica.