Entrevista a Begoña Errazti en el Diario de Noticias
¿Cómo valora EA la situación política actual en Navarra?
En la línea que ya expusieron UPN y CDN en el debate de investidura de hace un año: un gobierno de derechas que impulsa políticas muy conservadoras gracias al respaldo del señor Juan Cruz Alli, que ha preferido dejar de lado los principios de tolerancia, centrismo, pluralidad e integración de los que tanto le gusta hablar. CDN está siendo el cómplice necesario para la estrategia de los sectores más derechistas de UPN de intentar partir a Navarra en dos partes con el objetivo de practicar políticas excluyentes hacia los navarros que no siguen las directrices del pensamiento único de este Gobierno.
¿Cuál es su análisis de la acción del gobierno en este primer año de Legislatura?
En todo lo que se refiere a políticas sociales, a la redistribución de l riqueza y a la cohesión social y territorial, el lastre que está dejando la derecha en el Gobierno es dramático y aún será peor para las futuras generaciones. Sin olvidar que hacen de la hipocresía un ejercicio político diario…
¿Por ejemplo?
Mientras estaba el PP al frente del Gobierno de Madrid, UPN ha dejado aparcada cualquier reivindicación relacionada con el autogobierno de Navarra y ahora, tras la llegada de Rodríguez Zapatero a Moncloa, ponen en marcha un proceso interno en el Gobierno foral para elaborar un lista de transferencias pendientes. Por cierto, competencias previstas para Navarra en el Amejoramiento, que se aprobó, aunque sin refrendo social, hace 22 años y que todavía Madrid no ha transferido a Navarra.
¿Donde residen, a su juicio, los mayores déficits de este Gobierno?
UPN y CDN no están apostando por una Navarra en la que el desarrollo máximo del autogobierno sirva de eje para impulsar al desarrollo económico y social. Al contrario, creo que el proyecto político de la derecha está agotado y su permanencia en el poder sólo va a servir para ralentizar la puesta en marcha de las necesarias medidas de transformación en ámbitos como la industria, las nuevas tecnologías, el sistema educativo o el sector primario que necesita abordar Navarra para afrontar los retos más inmediatos. UPN y CDN gobiernan con los parámetros de una derecha dura, prácticamente ya única en el conjunto del Estado tras la derrota electoral del aznarismo, que en lugar de evolucionar hacia posiciones de centro está optando por bunkerizarse en sí mismo, alejándose cada vez más de los problemas y necesidades reales de la sociedad navarra.
Sin embargo, no parece que el Gobierno y menos aún el acuerdo político entre UPN y CDN estén dando muestras de debilidad.
Sí creo que la forma en que UPN ha afrontado los casos de irregularidades que están afectando a varios cargos públicos suyos, no queriendo aclarar qué ha sucedido o qué papel ha jugado cada uno de ellos en esas tramas, es un ejemplo claro de debilidad política. Cuando la corrupción vinculada a la política hace aparición pública, esconder la cabeza esperando que amaine la tormenta nunca ha sido un buena decisión. Y esa actitud está debilitando también el discurso regeneracionista del que acostumbra a hacer gala pública el señor Alli. Y hay otros ejemplos: la imagen del señor Sanz intentando disolver una manifestación legalmente convocada, o la presencia en el Gabinete de un consejero, el señor Palacios, dos veces reprobado por el Parlamento, incluso con los votos del socio de UPN en el Gobierno. O la pérdida de calidad en la prestación de los servicios públicos con la consiguiente repercusión directa en la calidad de vida de los ciudadanos… UPN y CDN han optado por una derechización ideológica en la que se prima lo privado en detrimento de lo público, incluso en un aspecto tan fundamental de nuestro sistema socio político como el área de salud. Creo que son ejemplos de la desorientación que dirige la acción política de este Gobierno conservador.
Solbes acaba de presentar los Presupuestos de 2005, que indican una caída de inversiones reales en Navarra cercana al 50% respecto a los datos de 2004. ¿Cómo se valora desde EA?
Primero, pone en evidencia la escasa capacidad de influencia del PSN en el conjunto del PSOE. Y, sobre todo, son un ejemplo más de la debilidad y dejación del Gobierno de UPN y CDN a la hora de defender los intereses reales de Navarra. Pero tampoco olvidemos que los años del PP en el Gobierno central, socio de UPN, han servido para concretar más bien poco en aquellos proyectos en que la voluntad de Madrid era determinante: ahí están los casos de la vía de alta capacidad entre Tudela y Medinaceli o el retraso preocupante en la extensión del tren de alta velocidad.
¿Y el aumento en un 9,5% de la aportación de Navarra a las cargas generales del Estado?
En realidad, ese dinero es para cuestiones de dudoso interés general, como los gastos militares o los gastos de mantenimiento de la Casa Real española. En el fondo, esa aportación es un obstáculo para la capacidad de desarrollo social y económico de Navarra, perjudica a los intereses reales de los ciudadanos navarros en cuestiones como la salud, las prestaciones sociales, la educación, etcétera. Y una prueba de que el marco de relaciones Navarra-Estado es perjudicial para los intereses de Navarra.
Iribarren acaba de anunciar la deflactación de la tarifa del IRPF en Navarra después de que UPN y CDN hayan bloqueado durante dos años esa posibilidad. ¿Qué opina?
Que UPN y CDN estaban sujetos a las consignas fiscales del PP, que apostaron por reducir los tramos de los impuestos a las rentas más altas y para compensar esas pérdidas de ingresos fiscales optaron por aumentar los impuestos indirectos, los que gravan tabaco, hidrocarburos, tasas etcétera, que todos los ciudadanos pagamos por igual independientemente de nuestra renta. Han jugado con las rentas de trabajo, sobre las que se ha centrado el mayor nivel de presión fiscal. Y de paso, vuelven a demostrar que su apuesta por el autogobierno de Navarra, en este caso en materia fiscal, es de boquilla, porque se han limitado a hacer seguidismo de las políticas fiscales que les dictaba el PP desde Madrid y ahora cambian de criterio en función de la nueva apuesta del Gobierno del PSOE.
Sanz acaba de suscribir un acuerdo en el ámbito de la Comunidad de Trabajo de los Pirineos que pide la oficialidad del euskera y del catalán en la UE. ¿Qué opina?
En primer lugar, que está bien. Pero resulta evidente que el señor Sanz, cuando se trata de cuestiones en las puede eludir cualquier responsabilidad efectiva, carece de todo reparo. La realidad se demuestra cuando es responsabilidad suya poner en marcha ese pronunciamiento y vemos como en Navarra los derechos lingüísticos respecto al euskera de miles de navarros son vulnerados sistemáticamente por el Gobierno que él mismo preside. En la enseñanza, en la universidad, en la administración…. y ahora con la complicidad de CDN. Ha habido una campaña sistemática, pensada y organizada, para hacer desaparecer la presencia normalizada del euskera.
¿Cuáles son las prioridades de EA para este curso que comienza?
Desde una postura de oposición que trabaja por buscar soluciones concretas para los ciudadanos, afrontamos dos ejes de debate claves: la situación del Estado de la Comunidad y la aprobación de los Presupuestos de Navarra para 2005. Creo que al término de ambos debates, la situación política de Navarra estará más clarificada, sobre todo en lo que se refiere a la posición del Partido Socialista.
¿Qué plantea EA para el debate sobre el Estado de la Comunidad?
Como prioridad, y teniendo en cuenta el debate abierto en el conjunto del Estado sobre la reforma del modelo de vertebración política, la profundización en el autogobierno foral, pero entendiendo nuestra capacidad competencial como elemento clave para el desarrollo social, económico y cultural de la sociedad. Navarra debe aprovechar, además, ese debate para que Navarra tenga su propia voz en el proceso de reforma del Estado.
¿Contempla también una posible reforma del Amejoramiento?
Sí. Sobre todo, teniendo en cuenta que se aprobó hace 22 años y todavía faltan de cumplir varios de los compromisos incluidos, que para EA, el techo político del Amejoramiento queda muy debajo de nuestras reivindicaciones políticas para Navarra, ya que ni de lejos recupera los derechos políticos reales que asisten a Navarra, y que es el único estatuto que no ha sido sometido al refrendo de los ciudadanos.
¿Cómo valora los cambios en la dirección del PSN tras el congreso?
Son decisiones internas y, por tanto, merecedoras de todo el respeto. Aún así, sorprende que la actual dirección del PSN haya dejado de lado su labor política de trasladar a la sociedad una alternativa real a las políticas de la derecha y haya optado por anclarse en el discurso más reaccionario de la derecha, que utiliza al nacionalismo vasco como excusa para ocultar su incapacidad a la hora de solucionar los problemas de los ciudadanos. Parece que se intenta olvidar que buena parte de la historia del PSN está sustentada en la colaboración con aquellos que no éramos la derecha tradicional de Navarra y que sólo cuando esa colaboración se vinculó precisamente a la derecha es cuando se creo el ámbito de cultivo para la corrupción política que afectó a los socialistas navarros.
¿Está más lejos ahora una posible alternativa plural a UPN y CDN?
EA seguirá trabajando en esa línea, porque ése es su objetivo estratégico prioritario en Navarra. Y sigo pensando que el PSN es el partido que necesariamente debe impulsar esa alternativa común, que, como demuestran las experiencias políticas en varios ayuntamientos, tiene un importante respaldo social. Si el PSN rompe esa vía de colaboración y se empeña en cerrar puertas, será el gran perjudicado. Navarra necesita un cambio político que permita afrontar una nueva modernización de sus líneas de desarrollo y creo que ahí el PSN debe jugar un papel fundamental. Si renuncia a ello como ya hizo en 1996, los ciudadanos le volverán a pasar factura democrática.
¿Tiene previsto algún contacto ya con Carlos Chivite?
No, al menos por ahora.
¿Qué papel le otorga a la experiencia de Nafarroa Bai en el panorama político de Navarra?
Teniendo en cuenta el poco tiempo que lleva de actividad (las elecciones generales fueron en marzo), ya ha puesto de manifiesto la existencia de una Navarra real al margen de la imagen institucionalizada y conservadora que estaban empeñados otros en trasladar a Madrid. Uxue Barkos está jugando un papel importante, dando continuidad a la defensa de los intereses reales de los navarros que estaban llevando a cabo también los partidos de ámbito nacional vasco en el Congreso.
¿A NaBai la puede afectar en su desarrollo futuro la evolución política que pueda darse en la CAV?
No lo creo.
¿Cuál es su análisis de la próxima Legislatura en la CAV?
Creo que seguirá el trabajo político que inicio el actual Gobierno Vasco en 2001. La actual Legislatura no termina con las elecciones de primavera de 2005, sino que tendrá continuidad con la reforma del Estatuto ya en marcha, que aunque no logre la mayoría absoluta en diciembre, sí ganará la votación en el Parlamento de Vitoria con lo que parece lógico que el desarrollo de esa propuesta tenga continuidad a partir de las elecciones. Sobre todo en lo que tiene ver con la consulta popular.
Si hay continuidad de Legislatura, ¿habrá también continuidad en la coalición con el PNV en la CAV?
La propuesta del Gobierno Vasco se desarrolla con la consulta popular que tendrá lugar la próxima Legislatura y con la continuidad del debate político sobre las relaciones con el Estado, que probablemente derivará en una confrontación democrática. Y todo ello necesita una confluencia de fuerzas políticas y de votos que permita seguir desarrollando lo que pusimos en marcha en 2001. En 2001, hubo una coalición, EA-PNV, que ganó las elecciones e inició este proceso político y si estamos hablando de continuidad del debate, parece lógico que mantengamos también el escenario en su conjunto.
¿Cree que el Gobierno de Zapatero abrirá la vía a esa consulta?
No soy optimista. Creo que el PSOE se mantiene en la misma actitud de cerrazón que antes con al propuesta del Gobierno Vasco. Existe una contradicción, difícilmente entendible desde el punto de vista democrático, con la actitud del Gobierno de Zapatero respecto a Catalunya, donde dice estar dispuesto a respetar lo que decida el Parlament de Catalunya, mientras ni siquiera quiere participar en el debate democrático del Parlamento de Vitoria.
¿Prevé la posibilidad de alcanzar para la reforma del Estatuto de Gernika un consenso mayor que el actual tras las elecciones? ¿Por ejemplo, con el PSE?
Lo veo complicado, porque la posición del Partido Socialista sigue situada en el inmovilismo absoluto. Porque es cierto que Zapatero no es igual que Aznar, y sólo faltaba, pero más allá de las formas, el fondo sigue igual: se mantiene la Ley de Partidos o un mal llamado pacto antiterrorista que en realidad va en contra de partido democráticos como EA y PNV. Y también es cierto que ha habido cambios importantes en el ámbito social, como la nueva Ley de Divorcio o el reconocimiento de los derechos civiles de las personas homosexuales, pero me gustaría que esa misma audacia ideológica la trasladará el señor Zapatero al debate sobre el nuevo modelo de Estado.
¿La vía federal que parece estar impulsando Rodríguez Zapatero, puede ser un primer paso para EA?
Es que no acabo de ver esa apuesta federalista por ningún lado. En el Parlamento de Vitoria se está impulsando un debate legal y democrático, como ha reconocido el propio Tribunal Constitucional desautorizando a todos los protagonistas de aquella feroz campaña, del que el PSE y el PP se han autoexcluido… En realidad, el nacionalismo español no puede siquiera admitir que se debate una propuesta que plantea un nuevo modelo de relaciones con el Estado. No es un proyecto segregacionista o independentista, sino una vía de participación desde el respeto a la capacidad de decisión de los ciudadanos. Y nada otorga más legitimidad democrática que someter las propuestas políticas al refrendo o rechazo de la sociedad.
Nuevo comunicado de ETA. ¿Qué opina de su contenido?
Que no dicen otra cosa que siguen ahí para continuar amenazando. ETA no puede pedir respeto a la voluntad de la sociedad vasca cuando lleva años vulnerando esa misma voluntad a la que apela. Para EA, ETA carece de cualquier legitimidad y su única decisión válida es permitir a este pueblo que trabaje en el único ámbito válido, las vías civiles y políticas.
¿Qué papel debe jugar, a su juicio, Batasuna en el presente político?
Llevamos años hablando de lo mismo. Debería apostar definitivamente por el ámbito de lo político y, partir de ahí, trasladar las inquietudes de su propio espacio social al debate. Pero para ello necesita de la independencia política, apostar por la construcción en vez de por la destrucción. Y quizá estemos en un momento clave en el que la inteligencia y la responsabilidad política son fundamentales para el avance soberanista desde el reconocimiento de la capacidad de decisión.
Elkarri pide un diálogo real a los partido y advierte de que se puede perder una oportunidad histórica.
En un país en el que existe un conflicto político, son importantes todas las reflexiones que aporten vías para solucionar ese conflicto y creo que esa es la importancia real del papel de Elkarri.
¿Para qué sirve el Foro Nacional de Debate?
Sirve buena parte de la respuesta anterior: es necesario buscar encuentros entre todas las fuerzas políticas y ése es también un compromiso básico de EA. El Foro Nacional de Debate agrupa a diversas organizaciones sociales, es cierto que en el ámbito político aún faltan incorporaciones importantes, y su virtualidad es ésa: servir de punto de encuentro.
Usted trasladó a Zapatero la necesidad de poner punto final a la política de dispersión penitenciaria, parece que sin mucho éxito.
Sí. Acabamos de escuchar al ministro de Interior justificar esta vulneración de los derechos de las personas presas, que también son derechos humanos, en su utilidad contra ETA, lo que desde el punto de vista de los valores democráticos deja mucho que desear. Y un día después, el Gobierno del PSOE deja en libertad a Galindo aplicando el artículo de la enfermedad, el mismo que se niega a decenas de presos sociales y, por supuesto, a los presos de ETA: es una falta de coherencia abrumadora. El Gobierno está enfangando de forma vergonzosa en el pasado más oscuro del PSOE. Y sobre aquella misma entrevista con Zapatero quiero aclarar que no le pedí que dialogar con ETA, eso me lo colgó un medio de Madrid, pero no es verdad: yo le pedí, en el ámbito de lo político que es el ámbito donde está EA, que buscara soluciones entre todos para este conflicto y que para ello buscará encuentros con la máxima prudencia y discreción. Y siempre separando debate político, pacificación, normalización social y reconciliación social de otros cuestiones también relacionadas con este conflicto político.
Fuente: Begoña Errazti