Entrevista en el diario DEIA La presidenta de EA mantiene en esta entrevista que «el talante hay que demostrarlo» y que Zapatero tiene pendiente pedir disculpas a EA y PNV «por haber utilizado el pacto antiterrorista para criminalizar ideas y a quienes hemos defendido los derechos del pueblo vasco».
Con los resultados electorales del pasado 17 de abril en la mano, Begoña Errazti tiene muy claro que la inmensa mayoría de la ciudadanía vasca comparte el criterio de que «El Estatuto de Gernika se ha terminado y resulta indispensable afrontar una segunda transición».
Etapa apasionante la que se abre este lunes en Gasteiz, ¿supongo?
No cabe duda de que va a ser una legislatura decisiva para seguir dando pasos en el terreno de la soberanía. De las urnas ha vuelto a surgir un Parlamento mayoritariamente abertzale. El pasado 30 de abril se aprobaba una propuesta de gobierno que habla de cambios sustanciales en las relaciones de la CAV con el Estado español y por tanto tenemos ya gran parte del trabajo hecho. A partir de ahora lo que toca es desarrollar los compromisos adquiridos y llegar a una consulta.
Sin olvidar el otro reto básico: la pacificación del País…
Es evidente que ése es otro de los ámbitos fundamentales en que va a tener que trabajar el nuevo Parlamento y el Gobierno que se forme, pero ahora, tras los últimos acontecimientos existe el riesgo de que se aprovechen las ansias de paz de este pueblo para mercadear con ellas a cambio del avance soberanista aprobado el pasado 30 de diciembre.
La actual composición de fuerzas dibuja un panorama complicado
Es bastante similar al que surgió de las elecciones de 2001, aunque aquel fue un momento muy condicionado por atentados, ilegalización de fuerzas políticas, etc… Lo que la mayoría abertzale nos ha pedido el 17 de abril es que exijamos una segunda transición y que sigamos cohesionándonos como País mirando a Nafarroa e Iparralde desde la CAV, que por tener en este momento más velocidad y población le toca tirar del carro. En definitiva: reconocimiento de Euskal Herria como sujeto político con capacidad de decisión y apuesta por crear un escenario de paz en este País que tanto la necesita.
¿Qué quiere decir con lo de la segunda transición con el Estado?
El pueblo vasco no fue considerado en su momento como debía en cuanto a reconocimiento de sus derechos, por ejemplo el derecho de autodeterminación. Esta segunda transición debe otorgar por supuesto una gran importancia al tema de la pacificación, pero sin que una cosa solape la otra. Queremos vivir en paz, pero la mayoría de este pueblo ha dicho claramente que quiere tener mayor acceso a sus propios recursos para optimizarlos mejor y mejorar el bienestar de los ciudadanos. Y a éso se le llama ejercer el derecho de autodeterminación.
Nunca se había hablado tanto de pacificación y normalización como en estas últimas semanas…
Lo que está claro es que nuestro pueblo tiene muchísimas ganas de paz, y es lógico. Son ya demasiados años sufriendo como sociedad las consecuencias de la violencia no sólo en lo personal, también en lo político. Por éso digo que hay muchas ganas, pero ahora hay que constatar si efectivamente existen datos para un escenario distinto. ¡Ojo con estas cosas!. Hay que extremar la prudencia y no generar falsas expectativas que al final deriven en frustración. No tenemos derecho a hacer daño a los hombres y mujeres del pueblo vasco.
Erkoreka animaba hace unos días a Zapatero a no cortarse a la hora de hablar con todo el mundo, de lo que se dedujo que también con ETA…
Yo le planteé lo mismo, cuando me reuní con él en septiembre de 2004. Si de verdad se quiere explorar el camino de la pacificación resulta indispensable el diálogo entre todas las fuerzas políticas sin exclusiones. Pero aquí se padece un conflicto armado que el Gobierno tiene la responsabilidad de solucionar y es evidente que ETA está en el centro de ése conflicto. Pero ésos procesos exigen prudencia y discreción. No se pueden acometer con medios de comunicación detrás porque hay que empastar demasiadas cosas.
La entrevista de Patxi López con EHAK ha levantado ampollas. ¿Se enmarca en el cambio de talante propiciado por Zapatero?
El talante hay que demostrarlo. Las palabras están muy bien pero tienen que ir acompañadas de hechos. EA lleva hablando hace tiempo con todos los partidos, salvo con el PP que no ha querido. El Pacto Antiterrorista y la Ley de Partidos, refrendados por PP y PSOE han sido las que han estado impidiendo hasta ahora que las fuerzas políticas hablaran. El diálogo sin exclusiones resulta indispensable, pero parece que algunos acaban de darse cuenta ahora de lo que es una obviedad.
¿Cree que el Pacto Antiterrorista ha salido tocado del último debate en el Parlamento español?
Lo que resulta evidente es que el PSOE tuvo demasiadas coincidencias con el PP en la pasada legislatura a la hora de aplicar políticas que supusieron un retroceso manifiesto de las libertades (Ley de Partidos, Pacto Antiterrorista, modificaciones interesadas del Código Penal, utilización de la legislación antiterrorista para el recorte de derechos básicos, etc…). Si el PSOE quiere mostrar con hechos su talante que empiece por devolver esas libertades sustraídas y haga un pronunciamiento público de que el Pacto antiterrorista no tiene ninguna validez.
Es decir, que rectifiquen…
El PSOE tiene pendiente todavía una petición de disculpas a fuerzas políticas como PNV y EA que aparecemos mencionadas en la introducción del Pacto antiterrorista y que en su día fuimos criminalizadas simplemente por defender los derechos nacionales de nuestro pueblo, frente a lo que ellos consideran la sacrosanta unidad española. El paso siguiente, por supuesto, debe ser la derogación de la Ley de Partidos, que también vulnera derechos absolutamente elementales y contradice incluso en muchos aspectos lo establecido en la propia Constitución española del 78. En definitiva, el presidente español Rodríguez Zapatero lo tiene fácil: basta con que reconozca que el Pacto antiterrorista sirvió solo al interés del PP y PSOE para criminalizar las ideas de defensa de la identidad vasca.
El propio Zapatero confesaba hace unos días que en materia antiterrorista lo único que les une ya al PP es el dolor por las victimas
Las víctimas nos deben unir a todos en cualquier caso. El respeto al sufrimiento, a las víctimas y sus familias, es algo en lo que todos coincidimos. Euskal Herria necesita un proceso de reconciliación. Este no es un tema que competa en exclusiva al PP y al PSOE, sino que es de todo este pueblo, incluido mi partido.
Llamazares ha propuesto crear un nuevo Foro o Mesa en la que estén todos los partidos
Lo importante es avanzar para lograr puntos de encuentro. El que se utilice el término: Mesa o Foro es lo de menos. También el Parlamento de Gasteiz y el de Navarra deben jugar un importante papel. Pero al menos en los primeros momentos van a ser necesarios otros escenarios. Hay demasiados asuntos en juego como para apostar por una única Mesa. Ahí está también el Foro de Debate Nacional en el que nosotros participamos desde el principio.
¿Qué virtualidad le otorga Eusko Alkartasuna a ése Foro?
De momento está siendo un punto de encuentro interesante incluso para partidos que no cuentan actualmente con representación institucional, sindicatos, etc… Es cierto que no están representadas todas las formaciones políticas de este País pero su voluntad es inclusiva. Nosotros empezamos esta reflexión hace dos años y su virtualidad es que se ha llegado a discursos de tipo del de Batasuna en el velódromo de Anoeta. De todas formas hay un peligro que no debemos correr en este País, que es el de la sacralización de un determinado Foro o Mesa. Eso es un error
¿Qué quiere decir con ello?
Que cada ámbito nos enseña con el paso de los años cuestiones distintas. El Acuerdo de Lizarra aportó unas determinadas cosas, la Mesa de Ajuria Enea evidenció que no puede haber puntos de encuentro con exclusiones y el Foro de Debate Nacional ha ido haciendo también sus reflexiones sin concitar, por cierto, el rechazo de otros partidos políticos, puesto que en todo momento han estado perfectamente informados. Tal vez sea ya el momento oportuno de constituir una nueva Mesa de partidos, pero tampoco conviene correr demasiado. Más vale ser prudentes para evitar luego decepciones. Toda mi generación ha estado mediatizada por la violencia y por el paso de una dictadura a una democracia que todavía resulta evidente que no ha terminado su trabajo.
Una Mesa, sugería el propio coordinador de IU, que tenga en cuenta no sólo al Parlamento de Gasteiz sino también a Navarra…
Por supuesto. Navarra es parte fundamental de la realidad histórica, cultural y social de Euskal Herria y tiene que tomar también una parte muy activa en el nuevo proceso que se ha abierto. Siempre desde el absoluto respeto a su realidad jurídica, como se deben respetar también las peculiaridades de la CAV o de Iparralde. El punto de partida es que los acuerdos y la construcción conjunta de algo sólo es posible si así lo quieren los ciudadanos.
Zapatero sabe que el PSOE y el PP tuvieron durante la pasada legislatura demasiadas coincidencias en el retroceso de libertades democráticas
———–
«Vamos a apoyar al candidato del PNV y esperamos que no haya sorpresas de otro tipo»
Se ha abierto un esperanzador escenario, pero en temas referidos a la pacificación conviene ser prudentes para no generar falsas expectativas ¿Sus representantes tienen muy claro qué van a hacer mañana?
EA y PNV ganamos en coalición las últimas elecciones en los tres territorios de la CAV, y por tanto apoyaremos para la presidencia del Parlamento al candidato que designe el PNV. Ese es nuestro acuerdo y lo vamos a cumplir. Lo que espero es que no haya sorpresas de otro tipo. Tenemos por delante una legislatura muy importante, de muchos cambios, y aparte de quiénes estén en los diferentes cargos institucionales, lo importante es para qué.
¿Por dónde van a ir sus primeras actuaciones en esta nueva etapa?
Por supuesto que por la profundización del autogobierno. Si algo está claro es que el Estatuto de Gernika, que durante un tiempo fue estupendo para optimizar nuestros recursos y nos permitió mejorar el bienestar de la gente, ya se ha terminando. Ha sido un buen instrumento, pero su fase histórica ha pasado.
Como portavoz de EA en el Parlamento navarro, ¿Cree que el desalojo de UPN está cerca?
Todavía restan dos años para las elecciones forales y la realidad es muy distinta a la de la CAV. En Navarra padecemos el Gobierno de la derecha tremenda y caciquil que representan UPN-CDN, que se mantiene en el poder legítimamente porque tienen votos para ello, pero que están generando un tremendo retroceso en materia de bienestar. Estoy hablando de hospitales, listas de espera o de los barracones que se han tenido que instalar en varias escuelas. Sanz está liderando una gestión ineficaz mientras coincide, eso sí, por su obsesión antivasca, con el presidente de La Rioja, que también se apellida Sanz, y que se dedica a interponer continuos recursos contra nuestras capacidades fiscales.
¿Qué pautas tendrían que darse para el cambio ?
La responsabilidad máxima corresponde al PSN que, sin embargo, sigue condicionado por sus asuntos internos, inmerso en un discurso antivasco, y encima no acaba de definir su estrategia. La conjunción de fuerzas políticas resulta indispensable pero el PSN tiene que implicarse también en ése viaje y, hoy por hoy, no lo está haciendo.
EA aboga de nuevo por un Órgano Común Nafarroa-CAV para defender juntos las agresiones contra los regímenes fiscales
Ya lo planteamos en 1995 cuando constituimos el Gobierno tripartito con PSN y CDN y creemos que sigue siendo necesario para buscar respuestas comunes a las agresiones homogeneizadoras de quienes agreden nuestros derechos históricos.
Satur Leoz deia.net
Fuente: Begoña Errazti