“El diseño de un servicio público que mire al futuro precisa de acuerdos amplios entre formaciones políticas, instituciones, sindicatos y agentes sociales”, traslada la formación a su militancia en los días en los que, en condiciones normales, hubiera celebrado el Alkartasun Eguna
Eusko Alkartasuna aboga por tejer nuevas mayorías que solucionen los problemas más acuciantes a los que se enfrenta la sociedad vasca en este incierto curso 2020-2021. Este es uno de los mensajes que la formación ha transmitido a la afiliación en los últimos días, en las semanas que, en circunstancias normales, se habría celebrado el Alkartasun Eguna. A falta del tradicional acto político seguido de la comida de hermandad que este año se hubiera celebrado en Iparralde, Eba Blanco, secretaria general de Eusko Alkartasuna ha dirigido una carta a la afiliación, así como un saludo en un vídeo. El Consejo Nacional reunido ayer de manera telemática reflexionó sobre las que considera bases principales del curso político.
Eusko Alkartasuna defiende que ante la gravedad de la crisis sanitaria que vivimos es preciso buscar acuerdos para establecer mayorías que diseñen un servicio público de calidad para hacer frente a las necesidades de la ciudadanía en este momento y de cara al futuro. La pandemia ha dejado claro que nuestro sistema público está estresado y con tiene graves deficiencias estructurales, como la temporalidad de la plantilla, entre otros problemas. El diseño de un servicio público que mire al futuro precisa de acuerdos amplios entre formaciones políticas, instituciones, sindicatos y agentes sociales.
Todo ello, bajo el paraguas de la soberanía, ya que se ha comprobado que tener capacidad de tomar decisiones propias y con ámbito nacional, de coordinación entre las tres entidades jurídico-políticas que actualmente forman Euskal Herria es vital.
La inhabilitación al president de la Generalitat, Quim Torra, reabre, además, el frente soberanista en el Estado. Este frente, que nunca se ha cerrado porque solo puede solucionarse por la vía del acuerdo y la decisión de la ciudadanía, afecta a Euskal Herria tanto como a Catalunya y, sobre todo, interpela al Ejecutivo de PSOE y Unidas Podemos. El Gobierno de Madrid puede hacer historia como el que abordó la democratización del Estado español o como el que perdió la oportunidad para ello.
A nivel nacional, estos momentos, señala el Consejo Nacional de Eusko Alkartasuna, las prioridades son “la situación sanitaria en Nafarroa, la posibilidad de que tengamos una legislatura marcada por el rodillo en la CAV y avanzar en garantías para los derechos sociales en Iparralde”.
Tanto la secretaria general en su carta a la afiliación como el Consejo rinden homenaje a la sociedad vasca, especialmente a quienes han sufrido las consecuencias más duras de la pandemia, y a las familias de los y las militantes que han fallecido durante el último medio año y a quien no se ha podido despedir como merecían.