Larrazabal ha solicitado en el Parlamento Vasco la comparecencia del consejero de Transportes y ha registrado una pregunta a la consejera de Medio Ambiente sobre el impacto negativo del plan en el humedal de Txingudi
Eusko Alkartasuna ha recibido con sorpresa y desagrado la noticia del acuerdo entre los gobiernos vasco y español para prolongar 200 metros la pista del aeropuerto de Hondarribia y facilitar así el establecimiento de las franjas de seguridad que exige la Organización de Aviación Civil Internacional. Sorpresa y desagrado, primero, porque el citado acuerdo no es fruto de un debate integral y en profundidad sobre infraestructuras y transporte de pasajeros en Euskadi, debate imprescindible que EA lleva años reclamando, y sorpresa y desagrado, en segundo lugar, porque estamos ante un acuerdo cocinado de espaldas al Parlamento Vasco y a las instituciones representativas de la sociedad de Gipuzkoa y muy en especial de Hondarribia, la localidad directamente perjudicada por el proyecto. En opinión de EA, no tiene ninguna justificación que el consejero de Transportes del Gobierno vasco, Iñaki Arriola, haya suscrito este acuerdo con el Ministerio de Fomento sin haberse dignado a dar cuenta del mismo a los vecinos de Hondarribia, del barrio de Mendelu en concreto, lo que supone un acto de desprecio absoluto hacia ellos.
EA se opone a prolongar la pista del aeropuerto de Hondarribia por los enormes costes sociales y ambientales del proyecto, que no se verán compensados de ninguna manera por los supuestos beneficios que traería alargar la pista. En este sentido es importante recordar que tanto el Gobierno vasco como la Diputación Foral de Gipuzkoa y los ayuntamientos de Donostia, Hondarribia e Irun elaboraron en 2004 un informe contrario a la ampliación del aeropuerto porque, según decían, “no mejora la operatividad del mismo, dados los condicionantes físicos y urbanos de su entorno”.
También AENA apostaba por la no ampliación en 2005, igual que el propio Gobierno español un año más tarde, porque “la capacidad de la plataforma es suficiente para atender la demanda prevista”. A la vista de la evolución de los acontecimientos, hoy no hay razones objetivas suficientes que justifiquen la prolongación de la pista, dado el impacto ambiental y social de esa obra. La propia AENA admite hoy que obtener una declaración positiva de impacto ambiental será muy complejo, por no decir imposible, porque alargar la pista obligaría a ocupar una parte importante del humedal de Txingudi, terreno de alto valor ecológico protegido por la normativa internacional y perteneciente a la Red Natura 2000.
Para EA es fundamental que cualquier plan de actuación en el aeropuerto de Hondarribia parta del respeto escrupuloso del medio ambiente y se base en estudios que demuestren sin género de duda la ausencia absoluta de impacto ambiental negativo en las marismas de Txingudi, una condición que de ninguna manera cumple el acuerdo entre el Gobierno vasco y el Ministerio de Fomento. Es de irresponsables anunciar la ampliación de la pista sin que se hayan elaborado los informes ambientales preceptivos.
EA también rechaza ese acuerdo porque no tiene en cuenta la afección social del proyecto, que llevaría la pista del aeropuerto casi hasta la puerta de las viviendas de Mendelu, lo que acarrearía problemas graves de seguridad además de un riesgo evidente para la salud de los vecinos de ese barrio de Hondarribia debido a la contaminación acústica inherente a todo aeropuerto.
Comparecencia y preguntas en el Parlamento
Por esta serie de razones el grupo parlamentario de EA ha registrado una solicitud de comparecencia del consejero de Transportes, Iñaki Arriola, en la Comisión de Vivienda, Obras Públicas y Transportes de la Cámara de Gasteiz para que informe del contenido de su acuerdo con Fomento y explique los informes técnicos en que se basa tal acuerdo.
Asimismo, EA ha presentado una batería de preguntas a la consejera de Medio Ambiente, Planificación Territorial, Agricultura y Pesca, Pilar Unzalu, acerca de los trámites y estudios ambientales que pueda haber elaborado su departamento y que puedan justificar en su opinión la viabilidad ambiental de la ampliación de la pista, tal y como plantea su compañero de gabinete.
Fuente: Eusko Alkartasuna