Eusko Alkartasuna afirma que la sentencia del Tribunal Supremo confirma que el Estado español no acepta el debate político democrático y opta por criminalizar la acción política legítima y no violenta. La formación muestra su solidaridad con las personas condenadas, así como con sus familias y las formaciones políticas y colectivos sociales a los que representan, y anima a la ciudadanía vasca a sumarse a los actos de protesta organizados en Euskal Herria.
La sentencia criminaliza la democracia, por cuanto castiga a líderes políticos por cumplir promesas electorales avaladas por las urnas, y la actividad política pacífica. Esto además, denuncia Eusko Alkartasuna, significa que se conculcan los derechos fundamentales de la ciudadanía que no puede confiar en conseguir sus legítimas aspiraciones sociales y nacionales por medio de la política y la democracia.
La sentencia que castiga a doce líderes políticos y sociales a casi cien años de prisión afecta de manera directa a Catalunya y la sociedad catalana, pero afecta también a Euskal Herria y su ciudadanía y a toda Europa, que no puede seguir haciendo oídos sordos a la realidad de un conflicto político en su seno que uno de sus estados miembro trata de reprimir mediante la conculcación de derechos fundamentales.
La sentencia deja a la vista las evidentes carencias democráticas del Estado español construido sobre la base del franquismo y que ahora mismo se traducen también en el hecho de estar a punto de celebrar las cuartas elecciones generales en cuatro años.