Eusko Alkartasuna considera que el Tribunal Supremo se ha posicionado con quienes quieren anclarse en el pasado con su decisión de volver a realizar el juicio de Bateragune y afirma que el Estado español tiene un problema de legitimidad democrática en su estructura jurídica.
La formación asegura que nadie en Euskal Herria va a entender que se juzgue a cinco personas que cumplieron íntegramente una condena que fue considerada injusta por instancias internacionales y menos que en 2020 haya personas juzgadas por pertenencia a ETA únicamente por actividad política.
Todo en la decisión del Supremo muestra la excepcionalidad de la medida tomada: la rapidez, la falta de precedentes, la postura contraria de la Fiscalía de la Audiencia Nacional,… Lo cual muestra el impulso político que existe detrás de la decisión, asegura Eusko Alkartasuna, que muestra su apoyo a los componentes de Bateragune, compañeros en EH Bildu.
Respetando la separación de poderes que debe haber en democracia pero consciente de que en el Estado español nunca ha funcionado, Eusko Alkartasuna insta al Gobierno de PSOE y Podemos a posicionarse contra la medida del Supremo y a reflexionar qué pasos adelante hay que dar para cerrar la etapa que la sociedad vasca nunca debió sufrir y centrarse en abordar sus consecuencias en profundidad.
Eusko Alkartasuna realiza un llamamiento para que el nuevo juicio a Bateragune no sirva para que la caverna mediática estatal desvíe la atención apagando el foco mediático de asuntos cruciales, como los turbios asuntos de los Borbones y que afecta a la Monarquía, o los históricos Presupuestos del Estado aprobados por una mayoría plural.