Artículo de José Ramón Urrutia, senador El pasado día 10 de Mayo se presentaba para su ratificación o rechazo en el Senado el texto del Estatut aprobado en el Congreso de los Diputados el 30 de marzo de 2.006, por 189 diputados de los 343 que en aquel momento estaban presentes en la votación, con un porcentaje de mayoría absoluta de un 55% de diputados.
Esta propuesta de Reforma de Estatuto de Cataluña, modificada sustancialmente tras la conversación mantenida en secreto entre el presidente del gobierno y el presidente de C.I.U., el día 21 de enero de 2.006, previa a una reunión del Comité Federal del P.S.O.E., tal vez sea algo mejor que el Estatuto actualmente vigente, pero tiene muy importantes diferencias con respecto al texto llegado del Parlament Catalán.
Creemos que esta propuesta no es suficiente para los catalanes, y que no van a resolver sus problemas de financiación , la L.O.F.C.A. es un corsé importante ,y los porcentajes sobre los impuestos directos e indirectos y los años acordados para las inversiones no van solventar el problema de los déficits de cara al futuro, tampoco se va a solucionar el tema de las competencias exclusivas y la interferencia en las mismas del estado, y su blindaje , ni la representación de la identidad nacional en las competiciones internacionales, ni las consultas populares vía referéndum, ni el problema de las infraestructuras viarias, ni el de la justicia y sus órganos representativos , ni el del uso de la lengua , etc.
El texto inicial de la Propuesta de Reforma del Estatuto de Autonomía de Cataluña, aprobado por el Parlamento Catalán el 30 de setiembre de 2.005 por 120 de los 135 diputados, con la mayoría casi unánime del 89% y con la solemne promesa del presidente R. Zapatero de respetar la propuesta del Parlament avalada por el Consell Consultiu, según nuestra opinión, tenia que haber sido el texto que el Congreso de los Diputados debía de haber convalidado, ya que Cataluña lo había aprobado por amplísima mayoría y de esta forma se hubiera aceptado por las Cortes españolas el criterio soberanista del Parlament Catalán.
¿Por que no ha sido así?
Porque sigue existiendo un miedo tremendo y todavía no se asimila, ni se asume el concepto de nación, piedra angular del texto inicial del Estatut, y se quiere que el mismo pase de tapadillo y sin aparecer propiamente en el articulado.
La afirmación de nación que esta hecha en el texto inicial, articulo 1, no va contra ninguna otra nación, ni pretende negar la existencia de ninguna otra nación, simplemente afirma lo que es propio, lo que es sentido como tal , con naturalidad, sin agresividad, sin tensión, ni violencia contra nadie, ni contra nada.
El negar la nación catalana, o la vasca en nuestro caso, viene de aquellos que negando nuestra existencia, solo reconocen la suya, la nación española, que hace incompatible con cualquier otra en el estado español.
El negar con tópicos, miedos, mentiras, amenazas, catástrofes y hasta con no se que penas, la realidad nacional de Cataluña o Euskal Herria, es ignorar algo constatable y no hace que esta realidad deje de existir en ningún momento. Cataluña y Euskadi son naciones, antes, ahora y siempre, lo digan o no lo digan las leyes y es un problema que si no se resuelve, se retrasa, o se esconde.
El estado español tiene un problema en si mismo¿ cabemos todos en `el tal como somos o no tenemos cabida?
Si el estado español no nos quiere tal como somos¿ que hacemos en `el? Dejemos la España integrista , la España que excluye. En pleno siglo XXI, un estado que se base solo en una nación , en una lengua, en una concepción radial, no tiene cabida . Como se puede decir que esta propuesta de Estatut ´consagra una unión confederal de estados´.
Cataluña es una nación, lo mismo que Euskal Herria, porque tiene una historia, una lengua, una cultura, un territorio, un derecho, unas instituciones , una idiosincrasia como pueblo y además y sobre todo porque se fundamenta en la expresión libre y democrática de la voluntad de sus ciudadanos /as de compartir un proyecto colectivo y de decidir sobre su futuro.
El articulo 1 del Proyecto inicial es el núcleo de la Propuesta, de `el se derivan todos los demás, bandera, símbolos, competencias exclusivas, justicia, identidad nacional y competiciones deportivas, lengua, financiación, infraestructuras, etc.
Al menos a los catalanes, con su Propuesta de Estatut, se les ha permitido observar su camino y las andanzas del mismo, los vascos, con la Propuesta del Parlamento Vasco aprobada por mayoría legal exigida el 30-12-2.004, solo vimos como la misma no se tomaba en consideración en febrero de 2.005 y era rechazada.
Todo lo anterior nos permita apreciar que no hay pasos hacia el principio de plurinacionalidad y de bilateralidad en las relaciones entre el estado y los derechos colectivos del pueblo catalán o del pueblo vasco.
Se ha rechazado consagrar a Cataluña como una nación en una ley orgánica, ya que ello hubiera significado un futuro reconocimiento a nivel de Unión Europea de nación sin estado, tal como lo puso de manifiesto la multitudinaria manifestación del 18 de febrero de 2.006 en Barcelona.
En resumen.
El futuro político de Cataluña no debe de pasar por esta Propuesta de Reforma de Estatut, recortada y manipulada, sino debe de ser el Proyecto de Estatut que salió del Parlament Catalán refrendada por el casi 90% de los representantes políticos de los ciudadanos y ciudadanas catalanas, y mas en consonancia, en nuestra opinión, con los derechos e intereses del pueblo catalán para decidir libremente sobre su futuro.
Por lo tanto E.A. debiera de rechazar con su voto esta Propuesta de Estatuto, pero en ese caso nuestra decisión se sumaria a los votos de otro partido político, con el cual en el modelo competencia y en el diseño del estado, entre otros temas, estamos en las antípodas, sin olvidar además que los padres del citado partido, no aceptaron el capitulo VIII de la C.E. (Comunidades Autónomas), y se opusieron al inicio de la reforma del Estatut.
Tampoco debiéramos votar que no, debido a que la composición numérica del Senado haría que la Propuesta de Estatut rechazada, volvería al Congreso, y se retrasaran todas las previsiones temporales realizadas, con los trastornos y asqueo de la ciudadanía catalana.
Tampoco debiéramos rechazar rotundamente esta Propuesta, porque nos opondríamos al pensar de un porcentaje de catalanes que creen, pensamos de buena voluntad, que este Estatuto es un paso adelante, aunque no cumpla con muchas de sus aspiraciones.
Por ello en la votación personal y por medio de la palabra nos abstuvimos en nombre de Eusko Alkartasuna.
José Ramón Urrutia Elorza
Senador de E.A. por la C.A. del País Vasco.
Fuente: José Ramon Urrutia