Eusko Alkaratasuna, Izquierda Abertzale y Alternatiba convocan conjuntamente la marcha, que coincidirá con la que se celebrará en Barcelona para denunciar el fallo contra el Estatut aprobado por la ciudadanía catalana.
Representantes de Eusko Alkartasuna, Izquierda Abertzale y Alternatiba han ofrecido hoy una rueda de prensa en Donostia para convocar la manifestación y explicar las razones para su celebración, a la vez que para llamar a la ciudadanía a secundarla.
La resolución del Tribunal Constitucional español sobre el Estatut aprobado por la ciudadanía catalana ha vuelto a dejar en evidencia que la Constitución española es un instrumento para la negación de los derechos y aspiraciones democráticas. En este contexto, el pueblo catalán reivindicará el derecho de autodeterminación con una manifestación que se celebrará el próximo 10 de julio bajo el lema “Som una nació. Nosaltres decidim”.
El Tribunal Constitucional es un instrumento negador del ámbito político y jurídico. Parte del aparato que, mediante la imposición, se empeña en encadenar la voluntad popular. Pero la voluntad popular no se puede secuestrar ni borrar por medio de una Constitución o un ámbito judicial que es ajeno a la voluntad mayoritaria de la ciudadanía.
La aceptación de que Euskal Herria y Catalunya son sujetos propios de decisión y un ámbito democrático en el que se respeten todos los derechos deben constituir el punto de encuentro de las opciones políticas. Sin embargo, pretenden neutralizar las condiciones sociopolíticas ya afianzadas para pasar de la negación al reconocimiento, impidiendo el desarrollo de las aspiraciones de la ciudadanía y escenificando la imposibilidad de realizar el camino hacia la autodeterminación.
Un nuevo marco político que recoja el derecho a decidir o el derecho de autodeterminación para dos pueblos que quieren elegir su futuro, para Catalunya y Euskal Herria. Esta es la voluntad de la sociedad catalana, como de la vasca, y así lo han declarado siempre que han tenido oportunidad. Las consultas sobre la independencia celebradas recientemente en muchos municipios catalanes son el ejemplo más cercano de que la sociedad catalana, igual que la ciudadanía vasca, desea realizar el camino hacia el ejercicio efectivo del derecho de autodeterminación por vías políticas, pacíficas y democráticas.
En este sentido, es imprescindible llevar a cabo una segunda transición en el Estado español, tanto en materia de organización territorial como en lo que respecta al marco jurídico. Es necesario abandonar el modelo que ha tratado de asimilar a las naciones para pasar a otro que reconozca la identidad nacional de Euskal Herria y Catalunya, así como el derecho de autodeterminación que les corresponde. Y para ello, además de una segunda transición, es necesario que el nacionalismo español recorra el camino hacia la plena democracia para responder a las demandas de la sociedad.
Un estado que se autodenomina como estado derecho no puede aceptar que los organismos que la conforman se posicionen en contra de la voluntad expresada por su ciudadanía en referéndum; al contrario, deberían ser garantes de la voluntad popular.
La ciudadanía demanda soluciones, exige respuestas. La ciudadanía vasca y la catalana queremos abandonar el laberinto de negaciones que dura años. Vascos y vascas, catalanes y catalanas queremos elegir nuestro futuro sin hipotecas ni injerencias. La ciudadanía de ambas naciones nos merecemos un futuro basado en la democracia y el reconocimiento de los derechos.
Muchas naciones europeas tienen como objetivo la autodeterminación total, han decidido recuperar sus señas de identidad y están recorriendo el camino para ello. Escocia, Groenlandia, Irlanda,… Este es el camino de Catalunya y Euskal Herria. Las dos naciones reivindican para sí procesos que en otros lugares de nuestro entorno se llevan a cabo con naturalidad y Madrid no podrá seguir negando derechos que se reconocen en el corazón de la Unión Europea. En este camino estamos y el siguiente paso tendrá como escenario las calles de Donostia.
Eusko Alkartasuna, Izquierda Abertzale y Alternatiba convocamos una manifestación nacional para el día 10 de julio en Donostia con el objetivo de denunciar que la ciudadanía vasca, como la catalana, ve negados sus derechos y para reivindicar que nuestro país demanda la autodeterminación.
El día 10 de julio se convertirá en fecha para exigir al Estado español el derecho de autodeterminación que tiene la ciudadanía de Euskal Herria y Catalunya para decidir libremente su futuro. Dos naciones saldrán a la calle para reclamar un derecho elemental, dos naciones pedirán que se acabe el ciclo de la negación y reclamarán al Estado español su reconocimiento.
Los partidos que comparecemos hoy aquí invitamos al conjunto de la ciudadanía vasca a participar en la manifestación, y realizamos un llamamiento para que los agentes sociales, sindicales y políticos se unan a esta convocatoria.
NAZIOA GARA.
AUTODETERMINAZIOA.
UZTAILAREN 10ean, DENOK DONOSTIARA!
Fuente: Eusko Alkartasuna