Hemos sido protagonistas este fin de semana.
Cada persona que unió sus manos, mentes y corazones en los 202 kilómetros desde la barandilla de la Kontxa hasta el Parlamento de Gasteiz hizo posible algo nunca antes logrado. En algunos sitios estirándonos, en otros apachurrándonos, nos unimos 175.000 personas.
Y todo esto siendo conscientes de que el futuro está en nuestras manos, y es por ello por lo que queremos también que esté en nuestras manos la decisión de cómo queremos que sea nuestro mañana. Vivimos en un pueblo que siempre se ha sentido libre. Reunido, organizado y libre. Y precisamente esa libertad de decisión es la que nos ha puesto en marcha muchísimas veces durante nuestra historia, y la que nos ha sacado a la calle a la ciudadanía de la Euskal Herria actual este fin de semana.
Queremos recalcar esa fuerza, ese poder y ese protagonismo. Porque es muy grande lo que logramos hacer este domingo, y si fue tan grande fue porque cada eslabón de la cadena se sintió grande, poderoso y necesario. Y necesitamos gente empoderada para pasar de ser una ciudadanía pasiva a una activa. Creernos que es posible, y utilizar y canalizar esa fuerza a diario; en el trabajo, haciendo recados, en el grupo de rugby o en la banda de música, en la compañía de teatro y entre la cuadrilla…
¡Lo estamos haciendo! El impresionante parón del 8M, las masivas concentraciones de las y los pensionistas cada lunes, la larga huelga en la enseñanza, Alternatiben Herria, el tsunami de solidaridad para con la injusticia de los jóvenes de Altsasu… Somos gente ordinaria haciendo cosas extraordinarias cuando nos ponemos mano a mano, y tomamos consciencia de la fuerza que generamos.
Este pasado domingo volvimos a ser protagonistas, pero esto no es una película. De ser,es una larga serie con muchos capítulos, donde se cuenta la historia de muchas y diversas habitantes de un pequeño país que quiere lograr una sociedad basada en la justicia social, en la ingualdad y en la libertad. Tiene muchos vaivenes esta serie, algún que otro antagonista también, dificultades y obstáculos, ayudantes… pero no vamos a contar el final de la serie, ya que ¡está en nuestras manos decidir qué final darle!
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