La enmienda presentada por la senadora de EH Bildu Idurre Bideguren ha propiciado un acuerdo para hacer posible que se flexibilicen las condiciones por las que las personas con discapacidad, especialmente las personas enfermas de polio o con síndrome pospolio, accedan a la jubilación. Bideguren ha llevado a la Comisión de Trabajo, Inclusión, Seguridad Social y Migraciones una reivindicación trabajada juntamente con las asociaciones vascas de personas enfermas de polio consiguiendo un resultado muy satisfactorio para ellas.
La moción responde al espíritu de las medidas acordadas en el Pacto de Toledo de noviembre y Bideguren espera que constituya “el último empujón para pasar de las palabras a los hechos”, ya que, según ha explicado “muy pocas personas con discapacidad han podido acceder a la jubilación anticipada debido a las exigencias requeridas, ahora se modificará la normativa para tener en cuenta la singularidad de las personas afectadas por la polio”.
Esta medida camina en la dirección de “acabar con la indiferencia, el olvido y la discriminación que han sufrido durante muchos años las personas enfermas de polio y del síndrome de postpolio”. La exigencia de que el grado de discapacidad igual o superior al 45% deba mantenerse durante todo el tiempo equivalente al período mínimo de cotización requerido, ha negado en la práctica a estas personas el derecho a la jubilación anticipada, “y siendo una enfermedad que afecta de modo progresivo a la capacidad de seguir trabajando según avanza la edad”, EH Bildu considera que el requisito para acogerse a la jubilación anticipada debe ser “que en el momento de acogerse a la jubilación anticipada tengan reconocido el grado de discapacidad del 45%”.
